La modernización del alumbrado costará siete millones en un plan a cuatro años
El Ayuntamiento autoriza la externalización del servicio municipal, contratando una empresa que cambie las farolas y las luminarias para favorecer la sostenibilidad y reducir la factura de la luz El Ayuntamiento de Valladolid ha contratado un plan de mantenimiento y modernización del alumbrado público que supondrá un coste a las arcas municipales cercano a los siete millones de euros. La Junta Local de Gobierno en su reunión semanal celebrada ayer dio luz verde al expediente de contratación de una actuación con dos propósitos principales: cambiar las luminarias más obsoletas existentes en la ciudad por sistemas de bajo consumo y más sostenibles, así como para intentar reducir la factura de la luz. La conservación del alumbrado existente en la capital vallisoletana, así como la renovación del mismo es el objeto del contrato suscrito ayer. El Consistorio de Valladolid cuenta en su organigrama municipal con el área municipal de Conservación e Infraestructuras, dentro del cual está el servicio de alumbrado, ambos pertenecientes a la Concejalía de Urbanismo. Pese a no desaparecer en ningún caso este departamento, el equipo de Gobierno externaliza una compleja labor del desarrollo ordinario de una ciudad que, por otro lado, suponía un importante desembolso a las arcas públicas, un dinero que puede ser más eficaz si es gestionado por una empresa del propio sector de la iluminación. De esta manera, los técnicos municipales serán quienes establezcan y planteen las distintas actuaciones a la empresa contratada, siendo en último extremo la concejala del área, Cristina Vidal Fernández, quien firme las intervenciones correspondientes antes de llevarse a cabo. Esta contratación supondrá una sinergia de los dineros públicos. Exactamente, la consignación presupuestaria asciende a un total de 6,8 millones de euros, distribuidos en anualidades de 1,7 millones, dado que el acuerdo rubricado ayer cuenta con una vigencia de cuatro años, entre el próximo ejercicio y el 2012. El contrato autorizado ayer evitará que más de doscientas farolas arrojen al cielo cerca de un dos por ciento de la luz que pagan las arcas municipales. La renovación de las luminarias, preferentemente las que producen contaminación lumínica en la ciudad, será la intervención más inmediata, del mismo modo que se viene realizando en los últimos años hasta el punto de que ése número apuntado es casi ínfimo debido a que a finales de 2006 la capital contaba con aproximadamente ochocientas farolas que incumplían la normativa básica de consumo ecológico y sostenible. En pocos meses, los sistemas que proyecten luz hacia el horizonte sólo serán las luminarias ornamentales colocadas entorno a los edificios monumentales. normativa sostenible. La Agenda Local 21 de Valladolid recoge estos parámetros para el consumo sostenible de energía para evitar la contaminación lumínica. Y este plan de modernización y renovación a cuatro años también contemplará la continuación de lo realizado en estos últimos meses: el cambio de más de medio millar de farolas del casco histórico. Su malogrado estado de conservación y la antigüedad de los sistemas de cableado internos invitaron al equipo de Gobierno a cambiarlas por otras de corte moderno, pero respetando la estética antigua, siempre teniendo en cuenta la zona donde iban a estar situadas. Además de ayudar a la sostenibilidad ambiental, el cambio también está propiciando una reducción del consumo y, por ende, de la factura de la luz. Un modo de trabajo que seguirá ejecutándose en los próximos tiempos. No obstante, el contrato también incluirá la conservación del nuevo parque de alumbrado público que se está instalando en los nuevos planes parciales. Así, Los Vivero, Los Santos-Pilarica, Ciudad de la Comunicación o Arcas Reales son los cuatro grandes desarrollos urbanísticos que también estarán incluidos en el contrato firmado. Cabe destacar también que el contrato, previa inspección del técnico municipal pertinente, así como de la aprobación por parte de la concejala delegada, regulará dos aspectos fundamentales para el alumbrado exterior: cómo debe ser dependiendo del tipo de calle, sus dimensiones, la cantidad de tráfico que circule por ella o su localización geográfica y el mantenimiento de las instalaciones y en último término el equipo de Gobierno municipal está estudiando la regulación de los carteles luminosos de los comercios de todos los barrios de la capital. Texto e imágenes tomadas del periódico: "El Día de Valladolid".
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